Restan cuatro meses para la llegada de la temporada decembrina y el sector privado venezolano se halla a la espera de que sean liquidados los más de $20 mil millones en deuda a proveedores extranjeros, en parte por concepto de mercancía decembrina de 2014, a fin de que estos puedan reactivar las líneas crediticias y enviar la nueva mercancía a Venezuela.
Así lo explicó Alberto Gámez, presidente de Fedecámaras-Lara y director nacional de la cúpula empresarial, quien explicó que este proceso suele tardar más de seis meses, hasta su puesta en vitrinas, por lo cual existe la posibilidad de que en las próximas navidades no exista oferta de mercancía para el público.
Calificó la situación como preocupante, porque estas importaciones no sólo incluyen arreglos navideños, juguetes y artículos de vestir, sino también ingredientes propios de la mesa navideña.
En tal sentido, explicó que en periodos anteriores solían realizar los pedidos entre mayo y julio, a fin de tramitar con el gobierno la aprobación de las divisas y posterior liquidación, a objeto de esperar un lapso de tres meses para la producción de la mercancía, que suele ser de China y de gran demanda, para posteriormente carcular hasta dos meses más en el traslado hasta Venezuela. La nacionalización puede demorar hasta seis semanas.
Detalló Gámez que los exhibidores solían estar abastecidos desde el mes de octubre, a fin de responder a la demanda de quienes perciben las utilidades por estas fechas.
Sin embargo, bajo la situación actual, aún no le han cancelados a los proveedores divisas de 2014, por lo cual, a pesar de que los pedidos han sido formalmente realizados, en algunos casos, los mismos no proceden debido a que las líneas crediticias se hallan temporalmente canceladas debido a la morosidad, que “más que responsabilidad del empresario, se debe a la demora de más de medio año, del gobierno, en el pago”.
Al consultarle cuáles son los términos de relación entre empresarios venezolanos y proveedores internacionales, en algunos casos aliados de varios años, señaló que estos afirman, en su mayoría,confiar en sector privado venezolano, no obstante, bajo las actuales circunstancias, no pueden abrir el crédito y ampliar las deudas.
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