El dirigente nacional de la Causa R, Andrés Velásquez, propuso la paralización de la jornada laboral para el próximo1 de septiembre, con el objetivo de acatar la convocatoria que hizo la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) a la marcha denominada la “Toma de Caracas”, para exigir al Consejo Nacional Electoral (CNE) la fecha para la realización de la siguiente etapa del referendo revocatorio contra Nicolás Maduro Moros.
Velásquez propuso convertir la jornada del próximo 1ero de septiembre “en una gran gesta de protesta nacional de la clase trabajadora que incluya, además de la marcha anunciada por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), la paralización de la jornada laboral por ese día para las personas que por diversas circunstancias se vean impedidas de acudir a Caracas”.
En ese sentido, consideró que “la jornada no debe ser sólo en Caracas, sino que la movilización debe ser realizada en todo el país; por lo que invitamos a aquellos que no puedan venir a acatar la convocatoria en el ámbito de sus estados, y dejar de acudir ese día al trabajo, porque la idea es convertir esa jornada en una gran gesta de protesta nacional de la clase trabajadora”.
Para Velásquez la protesta está garantizada por “la Constitución a los venezolanos como un derecho irrenunciciable”.
“Nicolás Maduro dijo que los distintos cuerpos de seguridad tienen instrucciones de que quienes salgan a marchar pueden ser detenidos, porque estarían fuera de la ley. Y yo le quiero decir que nuestro permiso es la Constitución de la República. Este es nuestro permiso Nicolás Maduro, y no nos vas a asustar, no nos vas a amedrentar, porque aquí está muy claro que manifestar es un derecho constitucional que nadie nos va a impedir ejercer”, enfatizó.
A su vez, el político se refirió al “empeño del gobierno y del CNE de impedir a toda costa la concreción del derecho constitucional de los venezolanos del revocatorio presidencial y las elecciones regionales, como única manera de enfrentar la crisis que hoy afecta al país”.
Se refirió a las elecciones de gobernadores, que según las leyes deben realizarse este año, y criticó a los que pretenden descartarla. “Es un derecho legítimo y democrático de los ciudadanos de todo el país elegir el gobierno que más conviene en cada estado”, sostuvo.
Por otro lado, calificó como una “estafa” el aumento salarial decretado por el presidente Nicolás Maduro el pasado viernes. “Aquí quien está sufriendo las consecuencias de la crisis, el más perjudicado, el que está pagando los platos rotos de la irresponsabilidad económica del gobierno, de este modelo de ruina y de pobreza, es el trabajador venezolano. Y nadie puede decir que la culpa de la inflación son los aumentos salariales, porque solo hay que ver por dónde va el costo de la vida y los salarios”, puntualizó.
Por último, precisó que “los salarios están en planta baja y el costo de la vida en el último piso, por lo que debemos decir que esos salarios son insuficientes, ya que la primera pregunta que debemos hacernos es: ¿con ese aumento cuánto alcanza para comprar comida? En segundo término, decir que un aumento aplicado para buscar un baño de popularidad, como lo hizo Nicolás Maduro, sin otras medidas complementarias en materia económica, resulta sencillamente inútil frente a este grado de inflación que tenemos en el país; y termina siendo, tal como fue presentado, una especie de estafa, de fraude al salario y a las pensiones en Venezuela”.
ND
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