Editorial chenoticias
El gobierno interino que preside Juan Guaidó se ha visto opacado en los últimos días tras la llegada de la pandemia COVID-19 a Venezuela, que ya registra 84 casos positivos, y que el mandantario, hasta ahora, no ha logrado hacerse de la información oficial, aún en manos del régimen socialista de Nicolás Maduro.
El 13 de marzo la vicepresidenta del régimen chavista, Delcy Rodríguez, confirmaba los dos primeros casos en el país, y no fue hasta 24 horas después que el también presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, se pronunció a través de su cuenta Twitter, anunciando una instalación de "la Comisión de Expertos de la Salud del Gobierno Legítimo".
Juan Guaidó, de manos atadas ante esta nueva crisis nacional, acusó al régimen de Maduro de "destrozar el sistema de salud, generando una crisis nutricional sin precedentes y pulverizado el acceso a servicios públicos".
El gobierno legítimo, como lo llama la oposición y más de 50 países, entregó el pasado 20 de marzo un kits de protección para atender la pandemia al Colegio de Enfermeras en Caracas, pero esta donación no es suficiente para una crisis pandémica que apenas lleva dos semana y que podría dejar consecuencias catastróficas si no se toman las medidas adecuadas en el deteriorado sistema de salud nacional.
Hasta la fecha, ni el dignatario ni la Asamblea Nacional manejan cifras oficiales ni un control específico sobre el seguimiento de casos positivos en Venezuela, solo se guían por los balances que ofrece el régimen socialista diariamente. Aunque en una entrevista al diario estadounidense El Nuevo Herald, Guaidó, acotó que "Nicolás Maduro oculta la gravedad del coronavirus y que hasta el pasado viernes 20 de marzo un ministerio le confirmó que existen más de 200 casos en el país", pero dicha información no se ha podido corroborar.
Mientras el coronavirus avanza en la nación, la censura y detenciones arbitrarias de periodistas por parte de cuerpos de seguridad del régimen chavista, también lo hace, y es que pareciera que nadie puede poner en duda ni opinar contrario a las declaraciones de los funcionario del régimen. El 21 de marzo funcionarios de las Fuerzas de Acciones Especiales (Faes) detuvieron al joven periodista Darvinson Rojas por tuitear datos del coronavirus, mientras que este martes 24 de marzo, El sindicato nacional de trabajadores de la prensa (SNTP), denunció la ilegal detención de la directoria del diario La Verdad de Vargas Beatríz Rodríguez por informar sobre casos distintos a los que habla el chavismo.
Más allá de cualquier pronóstico, todo indica que este panorama nada favorecedor para el presidente interino, Juan Guaidó, no terminará pronto.
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