El economista Ángel García Banchs, director de Econométrica, considera que, ante la posibilidad de un colapso económico, el gobierno deberá decidir entre dejar el sistema de control de cambio y el de control de precios o marchar hacia un totalitarismo aún más restrictivo y represivo
En una entrevista con el diario Nuevo Herald, el economista Ángel García Banchs, director de la firma Econométrica, alertó de que la economía venezolana está "a semanas de agotar totalmente sus inventarios de productos, un traumático fenómeno que podría producirse de golpe y que conduciría a una etapa de grandes cambios".
García Banchs recordó que la situación económica en Venezuela lleva meses en descomposición y advirtió que, ante este crítico panorama, el gobierno de Nicolás Maduro deberá decidir entre abandonar el sistema de control de cambio y el de control de precios o marchar hacia un totalitarismo aún más restrictivo y represivo.
"Esta es una realidad económica que el gobierno no puede cambiar, que no ha logrado hacerse en ninguna parte del mundo, que es mantener de alguna manera artificial a la economía cuando los inventarios bajan por debajo de cero", dijo García Banchs al Nuevo Herald.
Además, aseguró que no se podrán sostener por mucho tiempo más las políticas de control de cambio y de control de precios. "Hasta ahora, se han mantenido por la existencia de inventarios. Pero cuando estos terminen de agotarse, la caída del consumo va a ser espeluznante", pronosticó.
Al respecto, cree que los inventarios podrían agotarse por completo en el tercer trimestre del año.
A su juicio, es inviable que Maduro continúe ignorando la crisis, manteniendo los controles económicos y atribuyendo la escasez a una supuesta guerra económica.
"Lo que viene ahora, es que el consumo se va a desplomar. Y eso, no hay sociedad que lo resista sin que se produzcan procesos anárquicos, situaciones de caos, e incluso conflictivos de gran intensidad, que propician cambios políticos y económicos", señaló García Banchs, quien vaticina "un colapso de un solo golpe, cuando terminen de vaciarse los inventarios de las empresas, lo cual podría pasar de forma generalizada (...) Esa situación va a conducir a un proceso inflacionario descomunal, el mayor de toda nuestra historia monetaria".
Lea la nota completa en El Nuevo Herald.
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